Con la llegada del verano y las altas temperaturas registradas, el presidente de Sochimce, alerta sobre las peligrosas consecuencias de la exposición solar y la importancia de aumentar las medidas de protección.
De la mano con el arribo de una de las estaciones más esperadas por muchos, comienza la temporada de piscina y las altas temperaturas que llevan a muchos a buscar el “bronceado perfecto”, el mismo que sin las medidas necesarias puede transformarse, a largo plazo, en un tremendo problema para la salud,
Y es que pese a que se viene alertando respecto al peligro de los rayos UVB y UVA, la aparición de melanomas y cáncer en la piel ha tenido un crecimiento sostenido durante la última década. De hecho, según la Organización Mundial de la Salud cada año aparecen 3 millones de casos nuevos de cáncer a la piel en el mundo. En nuestro país la situación no es muy distinta, y la mortalidad por cáncer de piel ya aumentó entre un 50% y un 100% en los últimos 10 años.
Para el Doctor Jorge Díaz uno de los mayores problemas que presentamos los chilenos y que ayudarían al incremento en las cifras de cáncer a la piel es “la falta de memoria”. De acuerdo al profesional es importante “recordar que Chile está ubicado geográficamente en una zona que, lamentablemente, está afectada de manera diferente por los rayos ultravioleta que otras latitudes por la disminución de la capa de ozono que es el gran protector solar de nuestra tierra. Por eso nosotros estamos sometidos a una carga de radiación mucho mayor que otros países”.
En este sentido, el profesional plantea la necesidad de dejar de hacer del sol una preocupación sólo de temporada. “Éste es un tema que si bien relacionamos en el verano, debemos preocuparnos los 365 días del año y contar con un cuidado permanente. Pese a ello, efectivamente debemos tomar más medidas en esta época – porque estamos más expuestos- y realizar varios cambios en nuestros hábitos”, plantea.
Para Díaz es necesario que dejemos de lado la idea de que el protector solar se aplica sólo una vez y sólo antes la exposición directa al sol. “El solo uso de bloqueador nos quedó chico y debe ser reaplicado cada 3 a 4 horas. Hoy es necesario pensar además en la protección de nuestros ojos con lentes que tengan protección para rayos UVB, contemplar sombrillas o sombreros para cuidar el cuero cabelludo- especialmente para quienes tienen menos pelos”, señala el Presidente de la Sochimce, quien, además, pide contemplar prendas con protección ultravioleta.
“Si bien hay personas que trabajan de manera independiente, por ejemplo vendedores ambulantes que deben hacerse cargo de sus medidas de protección, no debemos olvidar que hay muchas personas que trabajan bajo contrato al aire libre, para ellos, hay leyes que exigen que el empleador proporcione los implementos necesarios para el cuidado a la exposición solar”.
En cuanto al uso de bloqueadores solares, el doctor Jorge Díaz, señala que “lo ideal es que como mínimo sean factor 30 a 35, eso como base, pero para quienes tienen una piel más delicada es mejor elegir sobre 50. Ahora más allá del factor, debemos preocuparnos también de la fecha de vencimiento de producto, idealmente que sea de la misma temporada, reaplicarlo cada 3 a 4 horas y de no olvidar ciertas zonas del cuerpo más delicadas como las orejas, parte posterior al cuello y la cara anterior de los pies”.
Equipo Prensa
Portal Prensa Salud