Reuniones con representantes de clínicas de cirugía mayor ambulatoria, la industria farmacéutica, sociedades médicas y universidades, tuvieron por objetivo identificar los desafíos que enfrenta cada gremio y trabajar para que los pacientes puedan acceder a una oferta de prestaciones amplia, segura, integral y debidamente regulada.
La Sociedad Chilena de Medicina y Cirugía Estética (Sochimce), organizó una serie de encuentros con distintos actores para promover en el país la práctica de la medicina estética de manera transversal y segura para los pacientes.
En las reuniones han estado presentes representantes de las clínicas, la industria farmacéutica, sociedades médicas y universidades, y en cada una ellas se han abordado temáticas de interés para cada grupo.
El Dr. Jorge Díaz, médico cirujano y Presidente de Sociedad Chilena de Medicina y Cirugía Estética, Sochimce, valoró cada instancia como una oportunidad de reconocer cuáles son las brechas en la regulación de la medicina y cirugía estética profesional. “La participación de todos los actores que estamos de una u otra manera ligados al rubro, es un reflejo de que asumimos a la estética como un objetivo transversal de la medicina. Lo que finalmente buscamos es el bienestar de las personas y para ello queremos que puedan acceder a una oferta amplia, segura, integral y debidamente regulada para este tipo de procedimientos”, explicó.
Encuentros sectoriales
En Chile, se estima que más del 70% de las cirugías con fines de embellecimiento se realizan en clínicas de cirugía mayor ambulatoria y de mediana complejidad. Por ello, el encuentro realizado con estas clínicas tuvo especial importancia. Los representantes plantearon la urgencia de un sistema de revisión de los elementos que los norman y también la necesidad de un mayor vínculo y relación con las autoridades mediante una organización que pueda representarlos como gremio.
“Para ellos es muy importante generar vínculos y estrategias para aumentar la seguridad en la atención. Aunque por el tipo de prestaciones que realizan, sus cifras de siniestralidad son mucho menores a las que manejan los hospitales y clínicas grandes, de todas maneras están dispuestos a colaborar para aumentar el bienestar de los pacientes”, explicó Diaz, quien además destacó el aporte de las clínicas de cirugía mayor ambulatoria a la medicina y la cirugía en el país, “ya que han demostrado ser efectivas, eficientes y seguras en su labor”.
En tanto, la reunión con representantes de la industria farmacéutica y distribuidores de dispositivos e insumos médicos, tuvo como primer objetivo la necesidad de crear una organización formal que les ayude a enfrentar el desafío del comercio ilegal, como la existencia de una gran cantidad de productos falsificados o de contrabando que ponen en riesgo a la población.
“Sería muy beneficioso para nosotros tener estándares más altos para el registro de insumos, productos y equipos que se utilizan en el área estética, y una coordinación directa de las empresas con las autoridades respectivas para evitar el comercio de productos clandestinos desde que ingresan al territorio”, acotó Rodolfo Medel, Gerente General de Flamamed, empresa distribuidora de insumos médicos y uno de los participantes del encuentro.
Finalmente, en la reunión con las sociedades médicas y representantes de las universidades que imparten posgrados en medicina y cirugía estética, se llegó a un consenso en la necesidad de certificar las competencias de los profesionales del país que hoy realizan este tipo de prestaciones sin beneficiar a una especialidad en particular.
Arturo Henríquez, representante de la Sociedad Chilena de Ginecología Estética, apuntó a la importancia de regular la oferta para que existan más profesionales calificados y las personas no deban recurrir a tratamientos clandestinos, con el grave riesgo que esto conlleva. “Respecto a la seguridad de los procedimientos estéticos, es muy importante señalar, que siendo las cirugías estéticas, cirugías de superficie y por lo tanto de muy bajo riesgo, se incrementan innecesariamente los riesgos realizando cirugías múltiples, prolongando por lo tanto el tiempo requerido de anestesia y los riesgos anestésicos. Se requiere imperativamente que los médicos y las clínicas apliquen los mismos criterios de alto riesgo para cirugías extensas o de más de 4 horas de anestesia” explica Henríquez.
A futuro, los representantes del gremio esperan contar con un sistema estandarizado de certificación de competencias, que permita que los pacientes se conviertan en los primeros fiscalizadores y puedan acceder libremente y de manera informada a los diversos procedimientos de medicina y cirugía estética en nuestro país Por ello, esta será una de las líneas de trabajo a desarrollar durante 2023 por parte de las sociedades médicas y universidades y será sin duda un insumo importante en las mesas técnicas en las que Sochimce participa junto con el MINSAL.
Equipo Prensa
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