¿Cómo mantener la motivación en el cuidado de la salud? Una opción es crear nuestras propias «recompensas». Y en esto las tecnologías ofrecen una serie de soluciones para mantener los hábitos saludables y hacerlos parte de nuestra vida.
Para entender por qué nos cuesta mantener los hábitos de salud, es importante observar nuestras motivaciones. Si nos dan a elegir entre un helado o una ensalada, ¿por qué muchos de nosotros nos inclinamos automáticamente por el postre? Es porque nuestro cerebro está programado para buscar recompensas. El aumento de dopamina que experimentamos al saborear una golosina nos indica que está ocurriendo algo relevante. Es un refuerzo positivo de nuestra acción.
“La búsqueda de recompensa puede tener un impacto en los tratamientos de salud”, advierte la Dra. Milagro Sosa, Directora Médica de Abbott. “Racionalmente, las personas pueden tener clara la importancia de tomar los medicamentos según las indicaciones del médico tratante. Sin embargo, la falta de «recompensa» o satisfacción inmediata puede dificultar, en muchos casos, la adherencia a los tratamientos”.
En efecto, un estudio publicado en 2018 arrojó que una de cada dos personas con enfermedades crónicas no toma sus medicamentos como debería (1). Otro estudio de 2012 demostró que los pacientes en tratamiento por hipertensión arterial no siguen más allá del 50 a 70% de las dosis recomendadas por su médico tratante (2).
Mantener la adherencia, genera beneficios para la salud. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), si toda la población siguiera sus tratamientos y creara hábitos saludables, podríamos hacer más por la salud que cualquier innovación en medicina (3).
En busca de recompensa
Cuando vemos los beneficios del tratamiento, es más probable que nos sintamos motivados a seguirlo. Pero en el caso de enfermedades crónicas, que requieren tratamientos de largo plazo, los beneficios pueden tardar. ¿Cómo mantener la motivación? Una opción es crear nuestras propias «recompensas».
“La acción suele conducir a la motivación, no al revés”, afirma la Dra. Sheri Pruitt, científica del comportamiento y psicóloga clínica. “Al dar el primer paso, aunque no tengamos ganas de hacerlo, encendemos una sensación de logro o recompensa. Esto, a su vez, alimenta nuestra motivación para continuar. Así que no esperes a que llegue la motivación; inicia la acción y deja que la motivación te siga”.
La tecnología puede desempeñar un papel importante a la hora de dar refuerzos positivos para encaminarnos en la dirección correcta. Existe una amplia gama de opciones. Entre ellas se incluyen:
Dispositivos de fitness o wearables. Ayudan con recordatorios, frases motivadoras y seguimiento en tiempo real de importantes parámetros de salud y bienestar. Pueden ser programadas para ayudar a las personas a seguir sus metas de salud, y fijarse objetivos, ya sea para tratar una enfermedad o cuidar su bienestar general.
Un estudio publicado por Abbott en 2024 reveló que los pacientes que mantuvieron un monitoreo remoto del tratamiento para la diabetes lograron mayores progresos en indicadores clave de salud, en comparación con quienes hicieron el tratamiento sin este monitoreo (4).
Apps de salud y rastreadores de progreso. Algunas ofrecen información y apoyo personalizados para crear hábitos saludables. Por ejemplo, la aplicación My a:care de Abbott (disponible en Google Play y App Store), combina ciencia del comportamiento con salud digital, para ayudar a las personas a seguir su tratamiento y vivir de forma más saludable.
Gamificación. La lógica de los videojuegos aplicada a la salud es una excelente solución para dar refuerzos positivos a los hábitos de salud, al ofrecer recompensas virtuales para mantener la motivación.
Inteligencia artificial. Las herramientas de IA pueden orientar sobre cómo cambiar el comportamiento, cómo combatir los malos hábitos y formar otros mejores, con resultados personalizados por edad, demografía, geografía y otros datos.
Cómo consolidar los hábitos de salud
Con el tiempo, la recompensa se hace menos necesaria, pues al realizar una tarea con regularidad, creamos una rutina. Si seguimos una rutina durante el tiempo suficiente, se convertirá en una actividad inconsciente y automática. Eso es señal de que nuestro hábito saludable se ha consolidado, y podemos disfrutar sus beneficios.
“Los hábitos saludables pueden ayudarte a aumentar tu energía, mejorar el estado de ánimo, combatir enfermedades y generar más resistencia”, afirma la Dra. Milagro Sosa, Directora Médica de Abbott. “Pero es importante no ser demasiado duro con uno mismo cuando las cosas no salen según lo previsto. Crear hábitos y mantenerlos es una carrera de largo aliento. Busca apoyo, usa las tecnologías disponibles, celebra cada pequeña victoria, no te rindas y mantente centrado en el objetivo final: lograr una mejor salud”.
Es importante seguir los tratamientos tal y como los ha prescrito el médico tratante. Sin duda, vale la pena mantener los hábitos, para consolidarlos en el tiempo.