En esta época del año, los cambios de temperatura y las actividades al aire libre pueden tener un impacto significativo en nuestra salud auditiva y si no son detectados a tiempo, en muchos casos podrían derivar en otros problemas.
El verano es sinónimo de calor y vacaciones. Sin embargo, no significa que estemos libres de malestares como resfríos y gripe. De hecho, la otitis es una de las principales causas de consulta médica durante el verano debido a los cambios de temperatura que afectan tanto a grandes como a chicos.
La otitis se produce por una acumulación de fluido detrás del tímpano, lo que provoca una inflamación del oído medio que puede afectar a uno o a los dos oídos al mismo tiempo. Durante la infección, en algunas personas puede haber una disminución auditiva importante.
En ese contexto, Andrea Lizama, fonoaudióloga de GAES Chile, una marca Amplifon, especializada en soluciones para la salud auditiva, hace especial hincapié en la importancia de la detección temprana y el cuidado de nuestros oídos durante los cambios de temperatura del verano.
“Los adultos de edad avanzada tienen un sistema inmunológico especialmente sensible a las agresiones externas, lo que les hace más susceptibles a padecer otitis y problemas auditivos durante esta época”, comenta el especialista. En el caso de los menores, según datos de la OMS, el 70% de los niños entre 0 y 7 años sufrirá de otitis una o más veces durante su infancia: “Es muy frecuente la aparición de la llamada otitis media, que se caracteriza por la acumulación de líquido en los oídos, lo cual también los deja mayormente expuestos”.
Los principales síntomas de esta infección son dolor y secreción en el oído, congestión y fiebre, además de problemas para dormir y pérdida de apetito. “Muchas veces a estos malestares no se les da el cuidado que requieren, lo que arriesga que el impacto en la audición se pueda volver crónico. Sin embargo, si la infección se trata y desaparece, en la mayoría de los casos, la audición no se ve afectada y vuelve a la normalidad”, advierte la fonoaudióloga de GAES Chile.
Por ello, tomar medidas adecuadas durante el verano es fundamental. “Al mismo tiempo, son clave los chequeos auditivos preventivos, o bien, acudir a un especialista en caso que las infecciones persistan”, señala Lizama.
Una de cada cinco personas en el mundo vive con pérdida auditiva. Por ello, e incluso en verano, es recomendable seguir estos simples consejos para cuidar la salud de nuestros oídos:
- Evitar cambios bruscos de temperatura. La exposición repentina a temperaturas extremas, como entrar en una piscina fría después de estar al sol, puede causar molestias en los oídos e incluso aumentar el riesgo de infecciones. Al tomar precauciones para minimizar estos cambios abruptos, contribuyes a mantener la salud auditiva y prevenir posibles complicaciones.
- Protege tus oídos del agua. Al nadar en piscinas, lagos o el mar, utiliza tapones para los oídos o protectores auditivos a prueba de agua para prevenir infecciones del oído y otitis externa. Para ello, se recomienda poner nuestros oídos en manos de especialistas, y evitar el uso de cotonitos o productos similares, que podrían provocarnos heridas o lesiones.
- Mantén tus oídos limpios y secos.Después de nadar o bañarte, asegúrate de secar bien tus oídos para evitar la acumulación de humedad, que puede propiciar el crecimiento de bacterias y hongos.
- Revisa tu audición.Los chequeos preventivos para cuidar tu audición y acudir a un especialista en caso que las infecciones persistan resulta clave, ya que de no tratarse pueden ser causantes de pérdida auditiva permanente. “Y esto nos ayudará a descartar problemas a tiempo y seguir el tratamiento indicado en cada caso”, explica la especialista.
La salud auditiva es crucial para nuestra vida y adoptar hábitos preventivos puede ayudar a disfrutar de un verano sin preocupaciones relacionadas con tus oídos.
Equipo Prensa
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