Su implementación puede generar ahorros de hasta un 10% en el primer año:
- Los edificios inteligentes permiten integrar la gestión de sistemas como iluminación y climatización en instalaciones sanitarias como hospitales, clínicas y centros médicos.
En un contexto donde el alza de los precios de la electricidad afecta directamente los costos operativos, las medidas de eficiencia energética cobran una relevancia aún mayor, especialmente para la industria sanitaria. Clínicas, hospitales y centros médicos son instalaciones que dependen de un consumo energético elevado para mantener servicios esenciales, como los sistemas de climatización, iluminación, equipos médicos y de soporte vital, así como áreas de esterilización y refrigeración de medicamentos.
«Al ser un sector con un consumo energético crítico, optimizar el uso de la energía es una prioridad para garantizar la continuidad de los servicios de salud», afirman desde la compañía Negawatt, que, en colaboración con Schneider Electric, ofrece una plataforma de supervisión para el control energético en instalaciones sanitarias.
Las soluciones de Digital Buildings permiten la integración y monitoreo en tiempo real de los sistemas energéticos, lo que facilita la reducción del desperdicio de energía, mejora la eficiencia operativa y contribuye al cumplimiento de las normativas medioambientales. Además, esta plataforma ayuda a identificar oportunidades de ahorro energético, planificar mantenimientos preventivos, y reducir los tiempos de inactividad de equipos esenciales, prolongando su vida útil.
Beneficios para el sector salud
La implementación de soluciones tecnológicas en hospitales y clínicas puede generar ahorros significativos de hasta un 10% en el primer año, según estimaciones de Negawatt. Este aspecto es especialmente relevante para el sector sanitario, que enfrenta constantes presiones para reducir costos operativos sin afectar la calidad de los servicios.
La norma en la cual se basa la gestión es la ISO 50001, un estándar internacional que promueve el desarrollo de políticas energéticas sostenibles. En las instalaciones sanitarias, la implementación de este sistema permite monitorear el consumo energético en servicios clave, como climatización, iluminación, refrigeración de medicamentos y operación de equipos médicos, mejorando los indicadores operativos y asegurando la continuidad de los servicios críticos.
Las capacidades analíticas de la plataforma permiten, además, identificar áreas de mejora y proponer acciones correctivas que optimicen los indicadores energéticos. De este modo, las clínicas y hospitales pueden reducir su huella de carbono, avanzar hacia los objetivos de sostenibilidad y asegurar la calidad de sus servicios, todo ello mientras se adaptan al contexto de alza de costos de energía.
En un escenario donde los precios de la energía siguen en aumento, el ahorro y la eficiencia energética en el sector sanitario se tornan fundamentales. Las soluciones actuales brindan una ventaja competitiva para clínicas y hospitales, permitiendo reducir el desperdicio energético, mejorar la eficiencia operativa y asegurar un uso más sostenible de los recursos. Además, permite a la organización postular a importantes reconocimientos y certificaciones relacionadas con los mismos edificios y con la cultura organizacional, como la ISO 50001 y el sello de excelencia energética.
Equipo Prensa
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