En el marco de su compromiso con la educación nutricional y la promoción de hábitos alimenticios saludables, Giser, empresa especializada en alimentación institucional, lanzó una cápsula educativa preparada por la nutricionista de la empresa, Anita Gaete. En ella, entrega una guía clara y sencilla para aprender a leer correctamente el etiquetado nutricional de los alimentos.
“El objetivo es ayudar a las personas a tomar decisiones informadas al momento de elegir qué consumir”, explica Anita Gaete, quien detalla los tres aspectos fundamentales a observar en las etiquetas:
- Porciones por envase y tamaño de porción: Es clave saber cuántas porciones contiene un producto y a cuántos gramos equivale una porción individual, ya que muchos datos nutricionales se expresan por porción.
- Macronutrientes: Se deben observar especialmente cuatro elementos: grasas, azúcares, sodio y fibra. Se recomienda evitar productos con grasas saturadas o sacarosa añadida, ya que pueden llevar a un mayor consumo de calorías y azúcares y, optar por aquellos con alto contenido de fibra y bajo sodio (idealmente menos de 200 mg por porción). Cabe destacar que los alimentos ricos en fibra son beneficiosos para la salud del sistema digestivo y favorece la sensación de saciedad.
- Lista de ingredientes: Esta aparece en orden decreciente, por lo que el primer ingrediente corresponde al que está en mayor proporción. Leer esta lista permite identificar rápidamente si un alimento es mayoritariamente saludable o no y si tiene algún alérgeno o ingrediente que desees evitar.
Además, Gaete recordó la importancia de evitar alimentos que presenten sellos de advertencia “Altos en” (calorías, grasas saturadas, azúcares o sodio). También destacó la importancia de comparar los etiquetados ya que con ello es posible identificar diferencias nutricionales y optar por la mejor opción. Finalmente, hizo un llamado a seguir a Giser en sus plataformas para obtener más contenidos educativos sobre alimentación saludable.
Con esta iniciativa, Giser refuerza su rol en la promoción del bienestar de las personas, entregando herramientas prácticas y accesibles para mejorar la relación con los alimentos desde el conocimiento.