De acuerdo al SENDA, el consumo de sustancias psicoactivas incrementa significativamente en las fiestas de fin de año. Esto, sumado a que este año las festividades caen en mitad de semana, la observación que hace Workmed sobre el impacto que tiene el consumo de alcohol y los accidentes graves son alarmantes.

Año nuevo es el último evento social disponible para que chilenos y chilenas puedan disfrutar con sus familias o tomarlos como días de descanso. Sin embargo, el consumo de alcohol también incrementa y esto, en temas sociales es preocupante, pero sobre todo, considerando que está vinculado a graves accidentes en el mundo laboral.

Según un informe de la Superintendencia de Seguridad Social (SUSESO), hasta el 15% de los accidentes laborales graves están relacionados con el consumo de alcohol o drogas

“Las fiestas de fin de año suelen ir acompañadas de celebraciones y un alza en el consumo de alcohol y drogas, lo que puede impactar directa y negativamente en la seguridad y el bienestar de los entornos laborales. El testeo regular de estos últimos es una herramienta efectiva para identificar a tiempo, patrones de uso entre los colaboradores y prevenir incidentes asociados al mismo”, explicó Gonzalo Blanco, medico director técnico en medicina preventiva de Workmed.

A ello, agregó que la seguridad laboral no solo depende de los protocolos utilizados, sino también de las condiciones en que se desempeñan los trabajadores. Identificar y prevenir el consumo de sustancias de manera eficaz y temprana ayuda a crear un entorno laboral saludable, seguro y productivo.

“El consumo de dichos elementos, afecta la concentración, el juicio y la capacidad de respuesta, incrementando riesgos de accidentes laborales, pérdida de productividad y la afectación del clima laboral, ya que las tensiones crecen cuando hay sospechas o evidencias de consumo en el trabajo”, indicó el Dr. Blanco.

Ante ello, dijo, la prevención resulta clave para garantizar un entorno laboral seguro, sano y productivo. El testeo regular es una herramienta efectiva para poder identificar patrones de consumo entre colaboradores, implementar medidas de prevención antes de que ocurran incidentes y promover una cultura de seguridad y salud corporativa.

Conforme al experto, durante las fiestas, las sustancias más comunes detectadas en las evaluaciones incluyen alcohol, marihuana, cocaína, anfetaminas, benzodiacepinas y opiáceos. Ellas, tienen efectos variados, desde alteraciones en la concentración hasta riesgos graves como incidentes por fallos en la toma de decisiones.
“Implementar un programa de testeo regular trae múltiples beneficios, entre ellos, la reducción de riesgos laborales, el aumento de la confianza del equipo de trabajo, el cumplimiento de las normas legales y de seguridad, y la prevención de accidentes que puedan generar daños a las personas y costos adicionales a la compañía. Las empresas que invierten en prevención también fortalecen su imágen como empleadores responsables”, finalizó Gonzalo Blanco.

 

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