La decana de la Facultad de Ciencias para el Cuidado de la Salud USS, dra María Teresa Valenzuela, explica que “es muy importante que las autoridades de salud tomen decisiones sobre resultados del testeo del Virus del Papiloma Humano (VPH), con métodos validados y con controles de calidad”, la vacuna actual cubre los genotipos 16 y 18 causantes del 60% de estos cánceres.
Cada año más de 600 mujeres mueren en Chile por el cáncer cervicouterino, según datos entregados por el Ministerio de Salud. Cifra que es aún más preocupante cuando esta enfermedad es el cuarto tipo de cáncer más frecuente en las mujeres de todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Respecto a la situación nacional, las vacunas existentes no son suficientes para solucionar totalmente este problema.
El 95% de los cánceres de cuello uterino se deben a una infección persistente por Virus del Papiloma Humano (VPH), según la misma investigación de la OMS. Una situación cada vez más compleja cuando en Chile, dentro del Programa Nacional de Inmunizaciones, las vacunas que se suministran a la población con el fin de tratar el VPH cubren solo dos de los genotipos oncogénicos y responsables del cáncer de cuello uterino.
Desde la Universidad San Sebastián, la decana de la Facultad de Ciencias para el Cuidado de la Salud, y epidemióloga María Teresa Valenzuela, considera de alta relevancia contar con buenos datos provenientes de un sistema de vigilancia epidemiológica robusto y difundir más las medidas de prevención.
“Hoy está instaurada la vacuna contra el VPH dentro del Programa Nacional de Inmunización, pero no tenemos un sistema de vigilancia epidemiológica robusto que dé respuesta a cuáles son los otros genotipos cancerígenos que afectan a las chilenas, sólo se pesquisan los tipos 16 y el 18, que están presentes en las vacunas que se suministran a la población en edad escolar. Debemos conocer el total de los genotipos causantes de cáncer cervicouterino y de lesiones intraepiteliales cervicales”, explicó la epidemióloga.
Agregando además que es “necesario tener un sistema de tamizaje con métodos que sean totalmente precisos, que cuenten con los controles de calidad, para que tengamos los resultados más acertados posibles, de manera que realmente tengamos evidencia científica acerca de qué es lo que está circulando en nuestro país”, concluyó.
Equipo Prensa
Portal Prensa Salud