Frutas, verduras, legumbres y cereales requieren distintos cuidados de almacenamiento. Aprende cómo conservarlos correctamente y por más tiempo, según explica una docente de Gastronomía del CFT Santo Tomás.  

Conservar correctamente los alimentos en el hogar permite mantener su sabor, frescura y valor nutricional por más tiempo, además de evitar el desperdicio, permitiendo un mayor ahorro. Para lograrlo, es clave conocer las mejores formas de almacenar frutas, verduras y productos secos. Así lo explica Ximena Castro Arancibia, chef y docente de Gastronomía Internacional y Tradicional Chilena del CFT Santo Tomás Santiago Centro, quien entrega recomendaciones esenciales para una conservación segura y eficiente.

Uno de los errores más comunes en la cocina es no diferenciar entre los distintos tipos de frutas y verduras al momento de guardarlas. Sobre esto, la chef afirmó:
“Algunas frutas como frutillas, uvas y kiwis deben guardarse en el refrigerador, idealmente en un recipiente ventilado o en su bolsa original con agujeros”.

Por el contrario, aseguró que algunas frutas pueden permanecer a temperatura ambiente en su primera etapa. “Las manzanas y peras pueden estar fuera del refrigerador hasta que maduren, y luego deben refrigerarse para prolongar su frescura”, recomendó. También sugirió observar su evolución: “Separar las frutas que maduren antes puede evitar que su humedad dañe al resto”.

Respecto a las verduras, la docente señala que la mayoría debe mantenerse refrigerada y en condiciones adecuadas. “La mayoría debe conservarse en el refrigerador, en recipientes con tapa o bolsas perforadas”, señaló, y añadió una recomendación especial para las hojas verdes: “En el caso de hojas verdes como espinacas o lechugas, recomiendo envolverlas en papel absorbente humedecido para mantener su textura”.

Asimismo, advirtió sobre un hábito común que puede perjudicar la conservación:
“Es mejor no lavar las verduras antes de guardarlas, ya que la humedad acelera su descomposición. Lávalas justo antes de usarlas, enfatizó. Si bien es posible almacenar algunas verduras ya cortadas en agua, aclaró que en esos casos “es fundamental prever un consumo rápido” y realizar revisiones frecuentes para evitar contaminación cruzada.

En cuanto a los productos secos, Ximena Castro hace hincapié en la necesidad de protegerlos de la humedad y de plagas. “Debes almacenarlos en frascos de vidrio o plástico herméticos, en un lugar fresco y seco. Idealmente, etiqueta la fecha de compra para evitar confusiones con productos nuevos”, aconsejó.

El sellado al vacío también es una opción válida, especialmente para prolongar la vida útil de ciertos alimentos. “El arroz también puede conservarse sellado al vacío, y lo mismo aplica para los cereales y granos como la quinoa”, explicó la chef. Esto no solo mantiene el sabor, sino que también previene la aparición de moho y la pérdida de sus propiedades.

Finalmente, recomendó estar atentos al estado de los productos almacenados:
“Revisar periódicamente estos productos ayuda a asegurar que estén en buenas condiciones” para su consumo.

 

Google News Portal Red Salud
Síguenos en Google Noticias

Equipo Prensa
Portal Prensa Salud

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here